Cientos de pájaros negros
levantando el vuelo,
una silueta en el medio
de la inmensidad.
El sol muriendo
en el marco de un cielo violeta,
te dices que este sería
un perfecto final.
Sólo que no lo es
y el tiempo no se detiene,
sólo que no lo es.
Dejas las llaves,
respiras, recojes la mesa,
luces ansiosa de ir
hacía al computador,
tienes que contarle al mundo
lo que has decidido:
“tomar de nuevo
las riendas de tu corazón”
Como si fuera,
como si fuera tan fácil,
como si fuera
verdad
¿Qué vas a hacer? ¿Qué vas a hacer contigo
cuando te enteres que ya no puedes volver?
¿Qué vas a hacer? ¿Qué vas a hacer conmigo
cuando te encuentres?
El sabe bien lo que buscas,
tu tipo le suena,
tu historia
ya la conoce de una canción;
lanza un anzuelo
y espera a ver lo que pasa,
hoy es su día de suerte:
tenía razón.
Eres solo una actriz
que no domina su arte aún,
que sólo sabe
llorar.
¿Qué vas a hacer? ¿Qué vas a hacer contigo
cuando te enteres que ya no puedes volver?
¿Qué vas a hacer? ¿Qué vas a hacer conmigo
cuando te encuentres?
